Una vez que los conflictos de patentes son cosa del pasado, el buje Rotax impulsa a Gottschalk. Muy pronto, gracias a sus éxitos en el ciclismo, el buje Rotax alcanza fama mundial y se convierte en sinónimo de calidad y fiabilidad, también en el ámbito privado.  Las por aquel entonces populares revistas sobre ciclismo informan positivamente sobre los éxitos en este deporte, pero también ilustran, con cartas de lectores, las ventajas cotidianas del buje Rotax.

«El conocido ciclista Hugo Schöler pasó por el puerto de Furka (Suiza), a 2436 metros de altura, con un buje libre de Rotax en su bicicleta. Solo tiene palabras de elogio para el trayecto y, principalmente, para el magnífico funcionamiento del buje de marcha libre Rotax. Y es que todos los días, casi cada hora, asistimos a este tipo de reconocimientos hacia el buje de marcha libre Rotax. Un rendimiento como el anteriormente descrito solo puede llevarlo a cabo un buje que realmente esté fabricado solo con los mejores materiales y cuya construcción ofrezca una garantía total de durabilidad».

«Creo que es mi obligación expresarles con esta carta mi absoluto reconocimiento de la bondad y la fiabilidad de su buje de marcha libre Rotax. He recorrido con su buje 6443 km en 70 días pasando por diferentes países. Las regiones de Bohemia, Baviera, Tirol y, principalmente Suiza, suponían un gran reto para el Rotax. Lo que antes parecía imposible, ahora se puede conseguir con su buje de marcha libre Rotax. No ha sido necesario realizar ninguna reparación y, si no hubiera llevado el buje de marcha libre Rotax, habría sido mucho más difícil atravesar el paso del Brennero (Italia). En esta carretera alcancé velocidades de entre 50 y 60 km/h y, a pesar de tener que frenar fuertemente en las curvas descendentes, el buje no se calentó ni lo más mínimo».